viernes, 30 de noviembre de 2012

Capítulo 16.

¡Estoy segura de que es él! Va ataviado con una gorra que tapa su pelo y unas gafas oscuras, pero sin embargo, sé que es él.
Mientras me tiende la mano para ayudarme a que me levante, le sigo observando detalladamente. Se cree que soy tonta y no me he dado cuenta de que es él. ¡Niall!
Antes que se valla, le señalo y empiezo a decir:
-¡ERES TÚ! ¡ERES....! - Pero no puedo terminar la frase, porque cuando me doy cuenta tengo su mano sobre mi boca, impidiendo que hable. ¿Qué hace? Noto el frío de su mano y siento que me sonrojo por momentos.
Sin darme cuenta hasta este momento, veo que estamos sentados en una pequeña cafetería en la que no hay ni un alma, excepto el camarero, pero se encontraba en la cocina, y él ya no lleva puesto su gorra y sus gafas. 
-¿Por qué haces eso? - Me mira acusadoramente. Ahora lo entiendo todo, me ha tapado la boca para que no le delatara y dijera su nombre delante de todo el mundo. Ahora que lo pienso, había un par de muchachas que estaban empezando a mirarnos raro.
-Lo siento, no era mi intención. -Digo mirando hacia el suelo.
En ese momento, me levanta la barbilla con delicadeza y me mira a los ojos.
-No te preocupes, sé que hago mella en el corazón de muchas chicas, no eres la única. -Dice con una amplia sonrisa.
¡Será tonto! Me empiezo a reír a carcajadas y él me mira divertido.
-¿Ha acabado el chiste? - Le suelto. -Sé que eres el chico de Nando's y sé quién eres en realidad.
-Vaya, ¡qué carácter! ¿Tú eras Noelia, verdad? Qué alegría volver a verte. Yo también sé quien soy, pequeña, medio mundo lo sabe, ¿recuerdas?-Dice guiñándome un ojo.
Tiene algo muy peculiar, y es que siempre está sonriendo. 
-¿Por qué no me dijiste en un primer momento que eras Niall Horan, integrante de One Direction. ¡Mi amiga fliparía si supiera que estoy hablando contigo! -Le digo, un pelín emocionada y confusa a la vez.
-Porque antes de ser Niall Horan, de One Direction, soy Niall, de Mullingar. Y me hacía gracia la manera en la que te comportabas. Si te llego a decir que era de One Direction, habrías actuado como las demás chicas... Gritando y llorando. -Dice muy serio y bajando la mirada.
En cierto modo, me da pena, porque aunque tenga a millones de personas que le adoran, nunca puede tener un poco de privacidad en su vida.
-¡Eh! Yo no soy una fan de One Direction, que conste, no me tendrás comiendo de tu mano jamás. Además, vuestro estilo me parece muy infantil - Le digo mientras me río a carcajadas y bromeando.
Él levanta la vista y empieza a reír.
-¡Vaya, chica dura! Entonces tú eres la excepción de la norma. - Me dice mirándome fijamente a los ojos.
¡Es guapísimo! Sus ojos brillan con alegría y empiezo a sonrojarme. Supongo que me intimida estar con él.
Entonces, mientras nos reímos podemos escuchar varios gritos de unas muchachas que no paran de repetir "¡¡¡Es Niall!!! ¡Está en esa cafetería!". Los dos nos miramos sorprendidos y él empieza a maldecir.
-¿Cómo han podido saber que estaba aquí? ¿Qué hago? Como se corra la voz nos podemos quedar aquí horas y horas hasta que venga alguien a sacarnos de aquí. 
Él mira preocupado hacia todos lados buscando algún sitio por el que salir, entonces mira en mi dirección y se les escapa una sonrisa. 
Veo que viene con paso decidido hacia mí. ¿Qué pretende hacer? 
Cuando está sentado al lado mía, levanta su mano y la posa en mi nuca. Entonces, me acerca hasta él y me da un beso.
Por un momento, no sé cómo reaccionar. ¿Me aparto de él? ¿Por qué ha hecho esto? 
Por otra parte, besa tan bien, es un beso dulce y delicado. Siento cientos de elefantes correteando por mi estómago y me tiemblan las piernas. ¿Por qué reacciono así? ¿Y si es verdad que en realidad me gusta? 
Pienso que es algo de locos, pero cierro los ojos y continúo con el beso. 



jueves, 29 de noviembre de 2012

Capítulo 15.

Suena la alarma a las 7 de la mañana. Creo que tendré suficiente tiempo para arreglarme, ya que entro a las 8 y media al instituto.
Lo primero que hago es ducharme, animada con música. En cuanto acabo, me pongo la ropa que elegí el día anterior, y, como pensaba, me gusta como queda el conjunto. Para terminar el conjunto, me pongo unos botines.
Cuando estoy vestida, me dirijo al cuarto de baño y pienso en cómo peinarme. ¿Una trenza? ¿Un moño? No, demasiado sencillo. Rápidamente, enciendo la plancha del pelo y me hago unas suaves ondulaciones en las puntas del pelo. ¡Así sí!
Bajo al salón y me tomo el desayuno, compuesto por un Nesquick y una tostada de mantequilla, para empezar bien la mañana. 
Entonces escucho que suena la puerta. Debe de ser Diane, así que termino rápido y me despido de mi madre. 
En la calle me encuentro a Diane, tan perfecta como todas las veces que la he visto, vestida con unos pitillos claros, una camiseta marrón y una americana bastante guay, y con el pelo rizado. 
Me sonríe y empezamos a hablar del instituto. Me cuenta algunas cosas sobre las asignaturas y los maestros, y me anima diciéndome que no me costará adaptarme.
Se lo agradezco y seguimos andando. 
Cuando llevamos un par de calles recorridas, ella se para y me dice que nos vemos en la puerta del instituto, que ha quedado con su novio.
Miro en la dirección que me señala y veo a un chico guapísimo , de un espeso pelo negro y ojos marrones, apoyado en una moto negra. Según lo que me ha dicho Diane, se llama Dan, y tiene un par de años más que nosotras. Ella se dirige hacia él y me deja sola en mitad de la calle sin saber hacia dónde dirigirme.
¡Vaya faena! ¿Cómo voy a saber dónde está el instituto?
Voy corriendo por las calles intentando encontrar el camino correcto, pero cuando me doy cuenta, he chocado contra alguien y estoy sentada en el suelo. ¡Qué torpe soy! ¡Ya van dos veces! 
Pero entonces levanto la mirada para ver contra quién he chocado y le veo. ¡Es él!

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Capítulo 14.

Ya estamos a 8 de enero. Bueno, prácticamente a 9, ya que son las 12 de la noche. 
En estos días no me ha ocurrido nada en especial, simplemente he estado con mis padres celebrando la Navidad. Tampoco he visto a Diane mucho. Pero sin embargo, hoy se ha pasado por mi casa. Al parecer vive cerca mía, y creo que también vamos al mismo instituto, así que me dijo que me esperaría para enseñarme el camino y el centro donde estudiaría este año. A parte de esto, no he vuelto a ver a Niall por Mullingar. Aunque bueno, ¿qué más da? 
Y aquí estoy, en frente de mi armario buscando algo adecuado para ponerme mañana. Es mi primer día, y por lo tanto, quiero ir bien. 
Toda mi ropa está desperdigada por el suelo y sigo sin encontrar nada. Entonces suena Wings de Little Mix y me viene la inspiración. 
Saco del cajón unas medias negras tupidas, un pantalón de tiro alto negro y una camisa de manga larga. Que conste que me he inspirado en los looks de las chicas de Little Mix. ¡Son geniales! Ojalá las pueda conocer algún día.
Dejo toda la ropa en el escritorio y bajo al salón, ya que me ha llamado mi madre. 
Cuando estoy en el salón, me dice mi padre:
-Noe, tenemos un par de noticias buenas para ti. 
-¿Sí? ¿Cómo cuáles? - Le pregunto curiosa.
-Hemos hablado con los padres de Elías y Valeria y les han dado permiso para que se vengan aquí a estudiar durante este curso.
Sin que nadie me detenga, empiezo a chillar y a pegar pequeños saltitos. Entonces suena el teléfono, me calmo y contesto. En el auricular escucho un grito muy parecido al mío, y vuelvo a gritar.
-¡Tíaaaaa! ¡Qué venís a Irlanda! - Nada más decir esto, las dos volvemos a gritar y a reír.
Hablamos un poco de lo que le han dicho sus padres y cuelgo. Entonces, papá vuelve a hablar:
-Pero, no podrán venir aquí hasta que termine este trimestre, más o menos, ya que están matriculados en el instituto de Madrid, y lo vemos muy precipitado. 
Le doy dos besos llenos de alegría y me subo a mi habitación loca de contenta. No importa que tenga que esperar unos cuantos meses, pero vendrán aquí.
Después de esto, recojo la ropa y me acuesto con una gran sonrisa en la cara.

Capítulo 13.

Por fin llegué a la puerta de mi casa. Saco las llaves lo más rápido posible y voy corriendo a mi habitación para encender mi portátil. Por suerte, mi padre contrató una tarifa de Internet nada más llegar a Irlanda.
Abro la ventana de Google e introduzco el nombre que me dijo Valeria. ''Niall''. Tengo que reconocer que es un nombre bonito. 
En seguida me sale en Google Niall One Direction, pincho en el enlace y se abre la Wikipedia. ''Te encontré, querido Niall'' pienso mientras leo y vuelvo a leer la información que viene sobre él.
"Niall James Horan nacido el 13 de septiembre de 1993 (19 años) en Mullingar, Westmeath, Irlanda."
¡Ajá! Conque no me equivocaba. Todo parece indicar que es él. No sé por qué, pero estoy eufórica. Bueno, no he escuchado a su grupo nunca, a parte de dos o tres canciones que me ha puesto Valeria. Pero es que saber que un famoso me ha pedido perdón. ¡A mí! Definitivamente, a Valeria le va a dar algo. Me conectaré a Tuenti después y se lo diré.
Pero antes, quiero ver unas fotos de Niall. Busco en el buscador de imágenes Niall Horan y salen miles de fotos del chico rubio que vi en Nando's. Definitivamente, es él. ¡Qué guapo es, dios! 
En todas las fotos sale sonriendo, como lo hacía en el restaurante. No sé por qué, pero yo también sonrío. Para ser alguien tan conocido se comportó muy bien conmigo. Y debo decir que me gusta un poquito. Pero por suerte o por desgracia, no creo que le vuelva a ver, demasiada casualidad sería.
Sin perder más tiempo, me conecto a Tuenti. Veo el perfil de varias personas y en mi pantalla de Inicio sale Ruth. ¡Ruth, mi archi-enemiga del instituto! Por suerte no la tendré que ver más.
Veo también el perfil de Elías, ha subido varias fotos en las que sale con Valeria y un par de conocidos.
Reviso mis notificaciones y veo un mensaje privado de mi hermano preguntándome que qué tal nos iba todo y cómo pasaríamos las fiestas. Le contesto rápidamente y sigo viendo mis notificaciones. Tengo varios comentarios de gente que no me hablaba en el instituto pero que sin embargo me dicen que me echarán de menos. ¡Hipócritas!
Pero, sin duda, lo que me hace sonreír es una foto que ha subido Valeria en la que salimos nosotros 3 sonriendo ampliamente. Me descargo la foto y la guardo en una carpeta.
Miro a las personas conectadas y veo que Valeria está conectada. ¡Verás cuando le diga mi descubrimiento!
Yo: ¡Vaaaaaal! Adivina a quién conocí en Nando's.
Valeria: ¿Sí? ¿A quién? Sorpréndeme. :P
Yo: Un tal Niall Horan...
Valeria: ¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!! Pero tía, cómo, cuando , ¿CÓMO? ¿POR QUÉ NO ME LO CONTASTES ANTES?
Yo: Dios, tranquilízate. No te conté antes, porque ni siquiera yo sabía quien era. A ver, es sencillo, estaba en la cola, él se coló y le canté las 40. XD
Valeria: ¡LE HAS CANTADO LAS 40 A NIALL JAMES HORAN! 
Yo: Jajajaj, lo mejor de todo es que luego se sentó conmigo a comer y me pidió disculpas.
Valeria: Tía, ¿no te das cuenta de la situación? HAS CUMPLIDO MI SUEÑO ANTES QUE YO D:
Yo: Vamos, no exageres, que no ha sido nada... Sólo eso.
Valeria: ¿SÓLO ESO? No te das cuenta de lo que dices D: Pero, bueno, cuéntame... ¿Cómo es?
Yo: Pues es... pf... muy guapo, la verdad. Tan rubio, tan sonriente, tan todo. No sé por qué se acercó a mí.Además, fue todo tan raro. Estoy confusa :/
Valeria: ¡Eh! A TI TE HA GUSTADO NIALL HORAN :D Este es tu primer paso como Directioner ;)
Yo: ¡No me gusta!....... Bueno, un poquito... ¡Sólo un poco!
Valeria: ¡Oh, qué mona! Seguro que serás una buena Directioner. ¿Te imaginas que lo vuelves a ver?
Yo: JAJAJAJA, no voy a ser Directioner. Sabes que no es mi estilo. Por cierto, será imposible que vuelva a verle. Es una estrella mundial, ¿recuerdas?
Al terminar de escribir, escucho el sonido de la puerta. Mis padres ya están aquí. Me despido de Valeria, y antes de apagar el ordenador vuelvo a mirar una foto de Niall y sonrío.



martes, 27 de noviembre de 2012

Capítulo 12.

Dejo el disco en el estante y vuelvo a mi casa corriendo como si hubiera visto al mismísimo diablo. ¿Todo esto es real? ¿He conocido a una estrella mundialmente conocida y no me había enterado? Cuando se lo cuente a Valeria va a flipar.
Voy corriendo por la calle intentando no chocar con la gente. Quiero llegar a mi casa y confirmar mis sospechas.
Voy cruzando las calles hasta llegar a la mía, pero cuando estoy cruzando la esquina noto que me choco con algo metálico y caigo al suelo.
-¡Joder!-Decimos yo y una voz de una chica al unísono.
Al escucharlo, empiezo a reír y veo a una chica tirada al lado mía y una bicicleta en la carretera.
La chica me mira con gesto ceñudo y empieza a reír. Me levanto y le tiendo una mano para que se pueda levantar ella también. Por suerte, a ninguna nos ha pasado nada. 
-¿No te han dicho que hay que mirar por dónde vas? - Me dice la chica muy seria. Vaya, no me la esperaba tan seria. 
-Oh, l-lo siento. - Le digo, mirando tímida hacia abajo.
-Jaja, tranquila, es broma. - Me dice la chica riéndose.
Me ha tomado bien el pelo. Le muestro una gran sonrisa, ya que me ha caído bien. ¿Dónde vivirá? También me fijo en ella, es alta, como yo, rozará el metro setenta, más o menos. Y es muy delgada y blanquita. Parece una modelo. Tiene el pelo igual de liso que el mío , pero en cambio, el suyo es de un color rubio espiga, en comparación con el mío, que es castaño. Sus ojos son azules, de un azul brillante.
Al ver sus ojos recuerdo al rubio de Nando's, el tal Niall. ''Cuando llegue a mi casa tengo que investigar sobre él'' me recuerdo.
Sigo observando a la chica mientras coge su bicicleta. Lleva unos pantalones ajustados y un a gran sudadera que le queda bastante grande, pero sin embargo, le sienta bien. Lleva el pelo recogido en una larga coleta que le llega hasta media espalda. ¡Tiene el pelo larguísimo!
-Me llamo Diane, ¿y tú? - Dice la chica para romper el hielo.
-Noelia, pero me puedes llamar Noe.
-¿No eres de aquí, verdad? 
-Jaja, no, soy de España. - Le contesto mientras sonrío. 
-Lo noté porque eres más morenita que el resto de las chicas que conozco. ¿Vives cerca de aquí? ¿Cúantos años tienes? 
Vaya, que insistente. Pero me transmite muy buen rollo así que le contesto:
-Sí, vivo en aquella casa de allí. - Le señalo mi casa.-Me mudé hace pocos días, el 21, mejor dicho. Y tengo 16 años. Aunque en Febrero es mi cumpleaños.
-Vaya, ¡qué suerte! Tenemos la misma edad. Yo los cumplo en Mayo.
¡Vaya! Nunca me hubiera esperado que tuviera mi misma edad. Parece muchísimo más mayor que yo. Presiento que me llevaré bien con ella.
-Si quieres me das tu número y te llamo para quedar algún día, ¿vale? Tengo un grupo de amigas que seguro que te caerán genial, y tú a ellas también. - Le doy mi número y ella vuelve a hablar.- Bueno, Noe, ya nos veremos en otra ocasión. Tengo que ir a trabajar. 
Coge la bicicleta y se marcha rápidamente. ¿Trabaja? Es muy joven para hacerlo. 
Decido cambiar de tema y prosigo el camino hacia mi casa para investigar a Niall, alías El rubio de Nando's.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Capítulo 11.

Tendría que haberle preguntado el nombre. Aunque bueno, ¿qué importa? No creo que lo vuelva a ver.
Cojo mi hamburguesa y me la como mientras pienso en todo lo ocurrido. Definitivamente, tengo que pedirle mi opinión a los chicos. 
De repente, la canción ''Hangover'' de Taio Cruz y Flo Rida empieza a sonar por todo el local y me doy cuenta de que es mi móvil. Toda la gente me mira y me pongo colorada. Maldita vergüenza.
-Hola, hija. Nos vamos a retrasar, ¿vale? ¿Ya has comido?- Pregunta mi madre.
-Sí, mamá. ¿Os retrasáis? ¿Y qué hago sola en la casa?
-Sí, tenemos que parar en más tiendas. Pues Noelia, da una vuelta por Mullingar. Un besito.
Mi madre corta y me deja con la palabra en la boca. Bien.
Ya he acabado de comer, y como no tengo nada mejor que hacer me meto en Twitter, subo la foto que hice del letrero de Nando's y menciono a Valeria y Elías.
Valeria me contesta en seguida diciendo que este es un lugar emblemático para las Directioners. ¡Mira tú qué bien!
Cierro Twitter y me meto en el grupo de WhatsApp. En seguida me llegan cientos de mensajes de Valeria preguntándome cosas de Mullingar.
Val1D<3:Tía, has estado en Nando's. ¿No te has fijado en si estaba allí Niall?
Noe;3: ¿Y ese es...?
Val1D<3:¿QUÉ QUIÉN ES ÉL? 
Elías(8): Niall Horan, integrante de la boyband del momento.XD
Noe;3: JAJAJAJA. ¿Y por qué estaría él aquí?
Val1D<3:¿Hola? Noe, él es de Mullingar.
Noe;3:Pues vaya... No he escuchado hablar de él por aquí... Chicos, me tengo que ir. Después hablamos, amores ;)
Decido no contarles lo ocurrido con el chico misterioso en Nando's, ya que no lo veo importante. Pero ahora que lo pienso... ¿Por qué se le acercó una chica pidiéndole una foto? ¿Y si fuera el tal Niall ese? Bah, imposible. Conocer a algún famoso no es algo que ocurra todos los días, y no creo que a mí me ocurra alguna vez. Además en el imposible caso de que fuera él, no se hubiera detenido a pedirme disculpas.
Dejando este tema a un lado, me levanto de la mesa y salgo del restaurante. Por suerte, ya no están las niñas de antes. ¡Qué respiro! 
Doy una vuelta por el pueblo, viendo tiendas y todo lo que me faltaba por ver estos días. 
En todas las calles hay un bullicio de gente. Todas van andando deprisa y no se fijan en todo lo que hay a su alrededor. 
En una esquina de una tienda, veo a un hombre mayor de pie tocando el violín, y un pequeño perro acurrucado a sus pies. Toda la gente está tan preocupada por sus problemas, que no ven que hay gente que está peor. 
Embelesada por la música, me detengo a escuchar las tristes notas que toca este hombre. En el estuche de su violín hay unos cuántos euros. 
La música continúa y noto como una pequeña lágrima cae sobre mi mejilla, el hombre lo nota y detiene la música.
Inmediatamente, le sonrío y miro lo que me queda en la cartera. 10 euros. Los cojo y se los echo en el estuche, y le digo adiós. El hombre me agradece el gesto con la mirada.
Mi camino continúa y pasó delante de una tienda de música. Decido entrar y echar una ojeada a los discos.
En cuanto entro, una encargada me saluda y voy al estante de novedades. Veo varios discos de artistas americanos, por ejemplo Taylor Swift. Ya ha sacado su nuevo disco, RED. Me apunto en mis notas mentales que tengo que comprarlo. Y al lado veo el nuevo disco de los One Direction. Seguro que Valeria está dando saltos de alegría. Me fijo en la portada y abro los ojos impresionada... 
¡El chico que está dentro de la cabina de teléfono es el rubio que estaba en Nando's!
-------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Si no os importa, me podéis decir qué os parece la historia y si os está gustando. Me lo podéis decir todo en mi twitter que es: @CrisMrsHoran. Y también me podéis decir que os avise para cuando suba nuevo capítulo. ¡No quiero lectores fantasmas, y al menos me gustaría saber quién lee mi novela!


domingo, 25 de noviembre de 2012

Capítulo 10.

Pues sí que tarda el chico este. Ha pedido 5 ensaladas especiales, 6 hamburguesas completas y 5 refrescos. ¿Acaso va a alimentar a un regimiento? Me pueden dar las 12 de la noche mientras espero aquí. Me desespera, en serio. Me fijo que muchas veces se gira para mirarme, sonríe y se da la vuelta. Demasiado raro. Encima, me da la impresión de que todo este paripé lo hace queriendo, y no entiendo el motivo.
Cuando para de hacer tonterías, me fijo en él mejor. Está muy delgado y no es muy alto. Más o menos como yo, y si yo mido 1,69, él medirá 1,71. Si mis cálculos no están mal, claro. Creo que no pegaría ni con cola con él, es tan rubio y guapo y yo tan... normal, del montón. Un momento... ¿por qué pienso en él de esta manera, si no me gusta?
Finalmente, termina su pedido y se lo traen para llevar. "Bueno, amiguete, ya no nos volveremos a ver más" pienso mientras le miro. ¿Por qué no puedo parar de mirarle? Pareceré una niñata estúpida mirándole con cara de perrito embobado. 
Salgo de mi ensimismamiento cuando veo que una chica, más joven que yo, se acerca a él con lágrimas en los ojos y extremadamente colorada y le pide una foto. 
¿Quién será este tío tan raro?
Cuando la chica se marcha, él deja  su comida en la barra y va al baño. Mientras, yo voy pidiendo mi comida. Una hamburguesa con queso estará bien. Y una botella de agua, claro. 
Me traen rápidamente el pedido y yo me siento en una mesa, sola. Mientras como, el chico sale del baño y veo que inspecciona el local y, misteriosamente, su mirada se detiene en mi mesa. Vuelve a coger su pedido y, con toda mi sorpresa, se acerca hacia donde estoy, se sienta a mi lado y saca un refresco y una hamburguesa.
-¿Hola? - Pregunto con ironía. 
-Hola. - Dice él con una gran sonrisa mientras empieza a masticar , más bien devorar, su hamburguesa.
-Mira, no sé si aquí en Irlanda es típico sentarse con gente desconocida, pero yo lo veo bastante rarito.
Él aparta la hamburguesa y empieza a reír. Su risa es muy contagiosa, pero debo permanecer dura, y por eso, le miro con cara de flipada.
-No eres muy agradable, ¿eh? - Me suelta con una sonrisa. Lo repito, ¡este tío tiene un morro que se lo pisa! Le miro con cara ceñuda y dice: -Vamos, en realidad seguro que eres simpática y todo. ¡Sonríe! ¿Cómo te llamas?
Me cae mal, pero ante todo, están los modales y le digo mi nombre y él, vuelve a sonreír. 

-Bueno, Noelia, lo siento. De verdad, que no era mi intención que el gerente te tratara así. -Dice él, muy serio.
Tal vez no sea tan idiota como creía. Dijo que tenía mucha prisa y, sin embargo, se ha sentado conmigo para pedirme disculpas. Tal vez...
-Vaya... Pues disculpas aceptadas, supongo. - Digo mientras sonrío levemente.
-Sabes sonreír, ¿eh? - Me dice mirándome muy, muy sonriente.
De repente, se levanta y recoge las cosas y yo me quedo impactada. ¿Ya se va? Bueno, tenía prisa, demasiado tiempo ha perdido hablando conmigo... ¿Cómo se llamara? No me lo ha dicho todavía...
-Oye, no me has dicho tu nombre... - Le digo en un susurro. Estoy nerviosa... Y lo gracioso es que no sé el motivo.
Él sigue su camino hacia la puerta, seguramente no me habrá escuchado. 
Se ha ido y yo no sé su nombre. ¿Le volveré a ver algún día? Lo dudo, la verdad. Y no sé si eso es bueno o malo.

¡IMPORTANTE!

Mi twitter es @CrisMrsHoran, y como no sé realmente quien la lee y tal, me podéis mencionar para que os avise cada vez que suba capítulo. GRACIAS POR LEER.

Capítulo 9.


Me callo repentinamente y me sonrojo. ¡Es muy guapo! Creo que tiene mi edad y me saca una cuarta de estatura, más o menos. Es rubio, aunque más bien tirando a castaño. Y tiene unos preciosos ojos azules. Los más bonitos que he visto en mi vida. Noto que me sonrojo e intento que no lo note, así que miro hacia otro lado, para evitar mirarle a los ojos.
-Perdona, pero tengo mucha prisa. - Dice el chico con un acento muy marcado.
¡Será...! Yo también tengo prisa, y además, llevo un cuarto de hora como para que ahora venga alguien y se adelante. Me cabreo más de lo que estoy y le digo:
-Pues toca esperar, como todo el mundo lo hace. ¿O acaso tú eres alguien especial?
El chico me mira sorprendido y sonríe. Vaya, otra vez me he puesto colorada. ¿Por qué hace eso? ¿Quiere intimidarme o algo?
Sin querer, por culpa de mi carácter, he formado un pequeño alboroto, así que el gerente del restaurante, viene a ver qué ha ocurrido y cuando nos ve, me mira con mala cara a mí y al chaval le mira con una cara como si hubiera visto a Dios. ¡Estoy indignada! Pero a pesar de todo, espero que el gerente me entienda cuando le cuente la historia, así que empiezo...
-Mire, señor, llevo un cuarto de hora esperando aquí y tengo que volver a mi casa rápido, y viene este chico - digo mientras miro al gerente y señalo al chico - como si fuera Dios y se ha colado. 
El chico se limita a observarme mientras hablo. ¿Por qué me mira tanto? ¿Acaso tengo monos en la cara o algo para que me mire así? No puedo evitar sonrojarme, ya que me da muchísima vergüenza que me miren. Sin poder controlar mi furia, le suelto:
-¿Miras algo en especial?
Esta pregunta le sorprende y aparta su vista de mi y puedo llegar a ver que las comisuras de su boca se levantan formando una bonita sonrisa. Sin evitarlo, sonrío un poco pero cuando me doy cuenta vuelvo a poner una cara que demuestre mi descontento.
El gerente me mira con cara desagradable y me dice:
-Lo siento, erm, señorita... Pero este chico es cliente preferente de nuestra cadena de restaurantes y por eso, nuestro trato hacia él tiene que ser mejor. 
¡Vaya morro tienen estos dos! 
-Me importan un comino si es preferente, como si quiere ser el príncipe de Inglaterra. - digo, mientras escucho que el rubio molesto suelta una carcajada.
-Si no se calma, le tendremos que echar de este local. Y si es tan amable, póngase detrás de nuestro cliente y espere.
Sin decir nada más, el gerente se marcha y el 'cliente preferente' me guiña un ojo. ¡Qué morro tiene este chaval encima! Pero como no puedo hacer nada más, me quedo callada y esperando detrás de él hasta que acabe.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Capítulo 8.

Ya estamos a 24 de Diciembre. Hace más o menos 4 días que vinimos a Irlanda y parece que fue ayer. Estas Navidades las pasaremos aquí, ya que todavía tenemos que 'adaptarnos'. Por lo tanto, serán unas Navidades especiales, por así decirlo.
Si digo la verdad, tengo ganas de empezar en el nuevo instituto, para conocer a más gente, ya que los días los paso en mi habitación sola. También he de decir, que he recorrido todo Mullingar, buscando sitios interesantes y tiendas donde poder ir. Y en una tienda que vi de aspecto rústico, me compré una foto del Big Ben para poder colgarla en la pared. Es absolutamente genial.
Todos estos días me he mantenido en contacto con Elías y Valeria y les he contado como es mi nuevo pueblo.
Miro el reloj y veo que son las dos de la tarde, y no sé qué hacer. El aburrimiento me puede.
-¡Noelia! ¡Baja un momento!- Oigo que grita mi madre.
Bajo rápidamente no sin antes tropezarme con el marco de la puerta. Ya sale a la luz la Noelia patosa. Cuando estoy en el salón con mis padres, ella me dice:
-Hoy vamos a ir tu padre y yo a comprar algo especial para esta noche, ya que es Nochebuena, ¿vale? Y como aún no nos ha dado tiempo de comprar mucha comida, ve a la ciudad y busca algún sitio donde comer. Pero come algo sano, ¿eh? Toma el dinero. - Dice mi madre y me da 20 euros. Es una suerte que aquí se utilice el euro y no las libras, porque si no sería un lío para mí, la verdad.
Poco después mis padres se marchan en el coche y yo me cambio para ir a comer, como me ha dicho mi madre. Me pongo unos leggins marrones y un chaleco de lana beige, ya que hace bastante frío. Me hago una cola alta y me pongo los zapatos, unas botas marrones, y voy a buscar algún sitio para comer.
Por el camino, veo muchos bares pequeños, pero no me decido por ninguno. Un poco más adelante, veo un vistoso cartel en el que pone "Nando's" y un un pollo de alegres colores. Sonrío levemente y pienso que será un buen lugar para comer. 
Mientras me voy acercando al local puedo ver a muchas muchachas gritando histéricas. Me pregunto qué les pasará para estar así. Bueno, no es mi asunto, yo he venido aquí para comer. Repaso algunas cosas olvidadas del inglés y me preparó para mantener una conversación en este idioma que tanto me gusta.
Entro esquivando a todas las chicas, de mi edad supongo, y entro a este curioso restaurante. Cuando entro, me fijo que es un establecimiento muy amplio y acogedor, muy familiar, diría yo. Hay mucha gente disfrutando de su comida y noto como me ruge el estómago. Me sonrojo levemente, espero que no lo haya escuchado nadie. Hago una foto con mi móvil al logotipo, para subirla después a mi recién estrenada cuenta de Twitter, para que mis amigos puedan ver dónde estoy. 
Me pongo en la cola, y tras esperar un cuarto de hora, aproximadamente, llega mi turno. Mientras avanzo hacia delante, noto que alguien me adelanta. Sin poder evitarlo, sale mi carácter español y le doy un pequeño toque en la espalda a quien se me ha adelantado.
-¡Oye, te has colado! Llevaba aquí un cuarto de...-Digo, pero me paro cuando veo que quien se ha colado se da la vuelta. 




jueves, 22 de noviembre de 2012

Capítulo 7.

Tras dos horas y media de vuelo por fin hemos llegado a Irlanda. La verdad que hace más frío de lo que me esperaba, pero ya me iré adaptando. Lo primero que hacemos, bueno, mi padre y yo, es coger las maletas de la cinta, mientras, mi madre llama a mi hermano para decirle que hemos llegado sin complicaciones. 
Tras salir del aeropuerto, viene un hombre, conocido de mi padre, trayendo un coche para que usemos mientras vivamos en Irlanda, ya que se lo 'ha prestado' la empresa a mi padre.
-¿Estás preparada para este nuevo país? ¡Vamos, hija, sonríe! No todos los días serán grises. Jaja, ¿has entendido? Grises, hay nubes, tú estás de mal humor.-Dice mi padre mientras conduce y echa una ojeada al espejito para ver mis reacciones.
Oh, vaya, aún no lo he dicho... Mi padre es el rey de los chistes malos. Cree que es gracioso... Pero no lo es. En fin, por lo menos me intenta animar. En realidad, ya estoy aceptando este cambio, pero delante de mis padres me muestro fría cual roca. 
-Claro, papá. ¡Wi, estamos en Irlanda, tierra de las oportunidades! -Digo irónicamente y mi madre empieza a reír.
-Vamos, cariño, seguro que te ocurrirán muchísimas cosas y no te arrepentirás de haber venido. -Dice mi madre, conciliadora como siempre.
''Eso espero'' pienso para mis adentros. 
El camino transcurre lento y cansado. Tras una hora en coche, he podido ver muchísimos paisajes. Montañas altísimas que rozaban con las nubes, una niebla densa que cubre muchos pueblecitos y unos cuantos lagos pequeños pero con un brillo especial. Finalmente, me fijo en un cartel en el que viene escrito ''Mullingar'', entonces pregunto qué es Mullingar y él me dice que es aquí donde viviremos este año, de momento. Me gusta, es bonita y parece un sitio agradable donde vivir. Puede que no esté tan mal vivir aquí en Irlanda. Mientras llegamos a la casa, puedo ver a través del cristal empañado a muchas personas yendo de un lugar para otro. Me fijo en el detalle que muchos son rubios o con el pelo claro. Y bueno, tuvo que llegar a esta ciudad una morena. ''Me imagino que sabrán diferenciarme'', pienso con ironía.
Finalmente, el coche se para frente una gran casa con aspecto antiguo. En el momento en el que poso mis ojos en ella, me quedo maravillada. ¡Es la casa más bonita que he visto! Es totalemente blanca, y con una gran ventanal que conecta el salón con el jardín. Vayamos por partes. Es una casa bastante grande, con muros altos y fuertes. También hay un jardín con muchos árboles y arbustos... ¡Vaya jardín! Es enorme, aquí podríamos construir una pequeña casa. A parte, al lado del jardin y de la puerta de entrada hay un garaje en el que poder meter el coche. 
Con la ayuda de mis padres, cogemos las maletas y las llevamos al interior de la casa. La dejamos plantas en el recibido y pasamos a ver todas las habitaciones. Según lo que voy viendo, en la planta baja está la cocina, el enorme salón con la chimenea, el cuarto de baño, un comedor y una enorme despensa. Subimos hasta la siguiente planta y hay 4 habitaciones. Demasiadas para nosotros 3, la verdad. La habitación de matrimonio era enorme, con su cuarto de baño individual y todo. Y después, de ver todos, voy a ver la que me quedaré, ya que hay 3 que sobran. La primera que miro tuvo que ser de algún niño, porque la cama es pequeña y está pintada completamente de azul y con dibujos de coches. No, esa no era para mí. La otra es muy parecida, pero los muebles están desgastados, así que tampoco me convence. Olvidé mencionar que todas están unidos por un largo pasillo. Finalmente, fui a la habitación que estaba al final del pasillo. Cuando la veo, me quedo maravillada. Tiene una gran cama con dosel, como la que todas las niñas queríamos tener cuando somos pequeñas, pues esa. Una mesa con un gran espejo delante y también tenía baño independiente. Estaba muy antigua, así que tendría que ponerle mi toque personal. 
Así que lo primero que hago es sacar el marco que me regalaron Valeria y Elías y ponerlo sobre la cómoda y coloco mis libros en una estantería que hay también.
Sí, definitivamente, este va a ser un buen lugar para vivir.

martes, 20 de noviembre de 2012

Capítulo 6.

Bueno, hasta aquí os he contado un resumen de todo lo que me ocurrió en estos 3 cortos meses desde Septiembre hasta Diciembre. ¿Qué me espera en Irlanda? La verdad, no lo sé... No sé si conseguiré adaptarme y encontrar a unos amigos que me comprenda. No pienso remplazar a Val y Elías, está claro, pero necesito buscar a alguien con quien compartir los días que esté en Irlanda. Hoy empezaban las vacaciones de Navidad. Se suponía que serían las mejores y que estaría feliz, pero desde que sé lo del viaje, mi estado de ánimo es pésimo. Supongo que es normal, ¿no? No todos los días una se va a vivir a otro país. Si me pongo a pensar, también hay cosas nuevas. Muchísimas cosas nuevas. Siempre me ha gustado vivir nuevas experiencias y aventuras. ¡Eso! Haré de este viaje una aventura, cada día veré algo nuevo. Tengo que hacer una lista de cosas que quiero hacer... Veamos...
COSAS QUE QUIERO HACER EN IRLANDA (O LONDRES)
1.Visitar todos los lugares famosos de Londres e Irlanda.
2. Conocer al mayor número de personas posibles.
3. Encontrar a (un noviete o algo) alguien especial.
4.Probar toda la comida típica de allí.
5. Aprender mejor el idioma.
6.Comprar ropa mucha ropa.
Dejo el bolígrafo apartado en la mesa... No se me ocurren más cosas, de todas formas, allí seguro que se me ocurrirá más. Estoy nerviosa, demasiado nerviosa de hecho, el avión sale a las 14h30 y ya son las 10 y no tengo nada preparado aún. Soy un desastre, un día tendré que tirarme de los pelos. Lo primero de todo, guardar la ropa. Cojo una maleta grande y guardo el mayor número de prendas posibles. Chaquetas, pantalones, leggins, sudaderas, camisetas y shorts, muchos shorts. Supongo que por allí hará frío, así que me llevo medias y ropa caliente. Bueno, la maleta de ropa esta preparada. Me falta mis cosas. Vuelvo a coger otra maleta, esta vez más pequeña y meto dentro mis libros, los álbumes que he ido rellenando a lo largo de los años con mis propios recuerdos. Creo que no falta nada, así que lo primero que hago es escribir a Val y a Elías. Sólo nos quedan unas horas juntos y quiero aprovecharlas al máximo. Antes de que lleguen me pongo unos shorts con unas medias negras, unas deportivas negras y una sudadera que vi en una tienda del centro de Madrid. Me miro al espejo para comprobar mi estado aquella mañana. Mi pelo es liso, así que no necesito arreglármelo demasiado. Rápidamente, me hago un moño. Sí. Es con lo que voy más cómoda siempre, y nunca me suelo maquillar, la verdad, porque el color de mi piel no es muy claro, más bien soy morena. En cambio, me poco un poco de rímel. Siempre hay que estar guapa, nunca se sabe lo que pasará o a quien te encontrarás. En realidad, no me considero guapa, soy una chica normal. Bastante alta para mi gusto y para mi edad y delgada. Eso en realidad, es bueno. Pero no tengo una gran inseguridad con mi cuerpo. ¡Estoy plana! Suelen decirme que tengo que desarrollar más, pero a estas alturas de la vida, lo dudo.
Diez minutos después de terminar, llaman a la puerta y yo corro para abrir a mis amigos. Ellos entran y no sé por qué, pero empiezo a fijarme en todos sus detalles que no quiero olvidar. Lo reconozco, soy dramática, pero tengo miedo de que por culpa de la distancia nuestra amistad se arruine. Me fijo en Elías. Mi Elías. Recuerdo el primer día que empecé a hablar con él. Un chico tímido, pero cuando lo conocías era divertido y muy amigo. Siempre le han criticado por no ser como el resto de la sociedad y seguir su propio rollo. Supongo que nosotros tres somos como la diferencia entre todos los chicos/as de mi instituto. Elías tiene el pelo negro y unos ojos verdes preciosos. Nunca me había fijado en él de esta manera, pero puedo decir que es guapo. 
Pasamos a Valeria... Ella es mi gran amiga, quien me escucha y entiende y a la inversa. Es muy insegura consigo misma, pero desde que empezó a escuchar al grupo este ha cambiado, se le nota. No entiendo su inseguridad, la verdad, porque aunque ella no lo crea, tiene loquito a todos los chicos del instituto. Su pelo es rubio y muy rizados y su ojos, castaños. Es un par de cabezas más baja que yo y estamos igual de delgadas las dos, pero ella sin embargo tiene algo especial, no sé el que...
-Noelia Ruiz Sánchez, ¿sigues en este planeta? - Dice Elías interrumpiendo mis pensamientos.
-Sí... Ehm... En realidad pensaba en que os iba a echar mucho de menos. 
-Anda, venid aquí pavas y vamos a darnos un abrazo enorme para quitarnos las penas, que tenéis unas caras que parece que se os ha muerto alguien. 
Elías nos coge del brazo a cada una y nos une en un abrazo a los tres. Desearía que este momento no acabara nunca, pero el tiempo apremia, ya eran las 12 y media y dentro de nada me marchaba al aeropuerto, así que les propuse de comer en el McDonalds, como solemos hacer a menudo.
Antes de que me de cuenta, Valeria saca de su bolso una pequeña bolsa con algo en su interior y me lo da con los ojos empañados. 
-Toma, esto es para ti. Esperamos los dos que te guste.-Dice al instante.
Nada más coger el pequeño regalo de la bolsa, me dispongo a abrirlo. Sorprendida y emocionada a la vez, veo que es un pequeño marco de fotos con una foto de nosotros 3 cuando empezamos la ESO. Éramos unos críos, tan felices, y sin ningún tipo de problemas. 
Inmediatamente, rompo a llorar, y como si fuera algo contagioso, Val también lo hace. Y, os digo un secreto, aunque después Elías lo niegue, pero le he visto secarse los ojos. 
Pasados esos momentos de llanto, nos dirigimos al McDonalds y, mientras comíamos, recordamos algunos de nuestros mejores días juntos.
1 hora más tarde, me encuentro en un taxi, ya que mi padre vendió el coche, de camino al aeropuerto. Cuando me despedí de mis amigos, me recordaron que les intentara llamar o hablar con ellos todos los días y que les informara de mis batallitas por tierras inglesas. También me dijeron que me hiciera una cuenta de Twitter y que pusiera las cosas que me pasaban, así ellos estarían al día. Aunque tengo que decir que no se me dan bien las redes sociales, de hecho, sólo utilizaba Tuenti para hablar con los compañeros de clase. 
El viaje en taxi ha acabado y ya estoy a punto de subir al avión. Cojo mi mp4 mientras pienso en lo que me espera en Irlanda. No sé por qué, pero presiento que me va a pasar algo bueno.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Capítulo 5.

En cuanto atravesé las puertas de la casa me dirigí hacia mis padres, que estaban junto a la cocina. ¿Qué harían esas maletas en la puerta? ¿Iban a algún lado?
-Papá, ¿y estás maletas? ¿Ha pasado algo? ¿Es esto lo que me querías decir? - Con los nervios empecé a hablar muy rápido, uno de mis defectos, si digo la verdad.
-Tranquila, no pasa nada malo. Si quieres pasamos al salón y te explico mejor.
Le acompañé hasta el salón, pero antes fui a saludar a mi abuela, que se encontraba trasteando en la cocina. Mientras ocurría todo esto, mi BlackBerry estaba que ardía por culpa de todos los WhatsApp que me mandaban Valeria y Elías. Por el momento, no les contestaría, era más importante saber lo que pasaba.
-Dime, por favor, estoy muy nerviosa.
-Ya lo sé, hija. A ver, he conseguido que me asciendan en la sucursal y nos tenemos que mudar a Irlanda. Sé que es difícil separarte de tu vida aquí en Madrid, pero si no consigo ese puesto me lo quitarán de las manos, y considerando lo que pagan, es mucho mejor para la familia.-Explicó mi padre.
En cuanto escuché la palabra mudarnos, mi mundo se derrumbaba. ¿Cómo iba a separarme de mis amigos en los momentos más difíciles de la adolescencia? Les necesitaba y siempre habíamos sido los tres inseparables. Valeria, Elías y Noelia. Da igual donde estuviéramos, pero siempre ibámos juntos a todos lados. También es verdad que no se me da bien conocer gente, ya que soy una chica tímida al principio, pero cuando cojo confianza, soy simpática con todos.
El idioma, sinceramente, no me preocupaba, porque desde que era chica estuve estudiando en academias de inglés, así que no supondría un problema... El problema sería empezar todo de cero, nuevo hogar, nuevos amigos y nuevo país. Sin poder remediarlo empecé a llorar y mi padre me abrazó para consolarme mientras me decía que esto sería un buen cambio en nuestras vidas y todo iría a mejor.
Tras calmarme un  poco cogí mi teléfono y empecé  a escribir a mis dos amigos.
Noe;3: Chicos, malísimas noticias. :(
Val1D<3: Tía, cuenta ya. Estoy muy preocupada :S
Elías(8): Hey, vamos, no nos hagas esperar, princesita.
Noe;3: Sí, claro.... A ver, que mi padre ha conseguido un trabajo en Irlanda, ya sabéis en la fábrica de coches... Y bueno, que me voy...
Val1D<3: Tía, no te puedes ir :( 
Noe;3: Ya, pero ¿qué hago yo? Necesitamos el dinero, ya sabéis, mi hermano está en la universidad y cuanto más mejor. Os echaré mucho de menos en serio.... :'(
Elías(8): Piensa que detrás de algo malo, viene algo bueno, pequeña. Te vas a Irlanda, es un sitio maravilloso, vivirás muchas aventuras y ya sabes, esta amistad nunca se acabará aunque nos separen los kms.
Val1D<3: Joder, Elías, que sentimental... Me has hecho llorar, en serio... Bueno, Noe, siempre estaremos en contacto, verdad? Siempre seguiremos siendo amigas... Además, si me llevas a Irlanda tal vez conozca a Niall XD. Noe, en serio, te quiero mucho, eres mi mejor amiga desde primaria, nunca lo olvides.
Tras leer este último mensaje de Valeria, no pude evitar echarme a llorar de nuevo. No me imaginaba sin ellos, donde yo estuviera, ellos estaban siempre conmigo. Les iba a echar mucho de menos, pero así es la vida, y como dijo Elías, después de la tormenta, siempre llegará la calma.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Twilight.

16 de Noviembre de 2012. Este día se estrena la última película de una saga que conoce todo el mundo. Puede no gustar a mucha gente, pero hay otra gente que siempre tendrá un bonito recuerdo de la saga.
Este día significa el fin de algo, algo que ha formado parte de la vida de muchas personas durante años. Porque son 4 libros (más 2 aparte) y 5 películas y puede parecer poco, pero para mí, significa mucho. ¿Quién no se enamoró de Edward mientras leía Crepúsculo? ¿Y quién no hubiera deseado ser Bella para tener un amigo como Jacob? En fin, ya ha acabado una saga que ha formado parte de mi vida y es muy importante para mí, al igual que Harry Potter, por ejemplo.

1.Crepúsculo.
¿Recordáis cómo empezó todo? Esto fue el comienzo de todo, conocimos a Bella, una chica muy patosa a veces. También conocimos a Edward (*---*) y pudimos enamorarnos poco a poco de él y de la relación entre ellos dos. También, conocimos a la familia Cullen, una familia un tanto peculiar, pero cuando te das cuenta, ya les has cogido cariño.
"Y así fue como el león se enamoró de la oveja."
2.Luna Nueva
Para mí, esta siempre fue la que más me gusto (hasta que vi Amanecer 2). ¿Por qué? Pues porque salió mi lobo favorito, que me encantó desde que leí los libros, he de decir. Y es que esta película me encanta por la amistad que se desarrolla entre Bella y Jake.
"No necesito ir al cielo si tú no puedes ir a él."
3.Eclipse
Creo que esta es la película que menos me gustó de todas, no sé si fue por la historia de los neófitos, que no me convenció, o el ver a mi Jake con el corazón partío'. Pero, en resumidas cuentas, no me terminó de convencer la película
"Cuida de mi corazón, lo he dejado contigo."
4.Amanecer (Parte 1)
Bueeeeno, llegó el momento de mi otra película favorita, esta sería la tercera, creo. Es MUY perfecta. Durante toda la película no puedes parar de emocionarte. Pf, llegó el momento que tanto esperábamos y es que, por fin, se casarían y serían felices juntos. La escena de la boda fue preciosa y no pude soltar unas lagrimillas de la alegría, porque sí, porque era feliz :3 El momento que suena Flightless bird (como se escriba) era tremendamente bonito. Y nada, Edward súper cuco cuando no quería hacer daño a Bella :3
"No puedo medir el tiempo que estaremos juntos, pero empecemos con un para siempre."
5.Amanecer (Parte 2)
Y finalmente, y por desgracia de muchos, llegó el final de esta maravillosa saga. Y creo que puedo afirmar que ésta, ha sido sin duda, la mejor de toda la saga. Yo no iba con las expectativas muy altas, porque el libro no me gustó mucho, demasiado largo para mi gusto, pero durante toda la película reí, estuve en tensión y finalmente, lloré. No hay parte que no me haya gustado. Y cuando empezó la batalla, y 'mataron' a Carlisle y a Jasper, lloré como una niña chica. Jo, eran mis Cullen, y no me lo podía creer. Y cuando murieron los gemelos (Lea y Seth) igual, no podía parar de llorar. Incluso pegué algunos saltitos en la butaca. Pero cuando se descubrió todo, lloré incluso más, de la alegría diría yo, al saber que todo acababa bien y no les pasaba nada. Por eso creo que en esta película valoras más a los Cullen, porque en las otras películas les coges cariño, pero cuando en esta vez que mueren, sentí mucha pena. Y bueno, el final, Edward y Bella en la pradera... ¿Qué puedo decir? Fue precioso, la mejor escena, repito que no podía parar de llorar, y encima empezó a sonar A Thousand Years y a salir los momentos que vivieron juntos. Esto fue el resultado de un final de saga increíble.
"Para siempre no dura tanto como esperaba."

Bueno, acabo esta entrada diciendo que echaré mucho de menos no volver a saber nada de mi Bella, mi Edward, mi Jake y mis Cullen. Y sí, digo que son mis..., porque ya forman una parte de mi vida. Espero que le guste esta entrada a quien la lea y se sienta identificado/a conmigo.